Con el fin de apoyar a los jóvenes y abrirles la puerta hacia un estado mental saludable, el Ayuntamiento de Madrid ha puesto en marcha un servicio de psicología y coaching dirigido a adolescentes y jóvenes mayores de edad a través de sus centros juveniles y programas de juventud. Y el Área de Gobierno de Políticas Sociales, Familia e Igualdad ha decidido reforzar este servicio para ampliar su alcance tanto en los centros juveniles municipales como en otros programas de Juventud, como las 16 sedes del Programa QuedaT.com.
El servicio se dirige a personas de entre 14 y 30 años residentes en la ciudad de Madrid y que actualmente no estén en tratamiento psicológico o psiquiátrico. Tienen prioridad en la atención los usuarios de centros juveniles de los programas de Juventud del Ayuntamiento.
El nuevo contrato para este servicio, con una inversión superior al medio millón de euros, recoge diversas mejoras con respecto al ahora vigente al sumar un nuevo psicólogo a jornada completa que se una a los cuatro que ya prestan servicio. Además, incluye una vía de modificación que permitiría aumentar la dotación de medios humanos para atender un hipotético crecimiento de la demanda.
Herramientas para mejorar y atención personal
Gema Sancho, coordinadora este servicio de psicología y coaching, explica que una situación de problemas de relación de la persona con aquellos que le rodean, hasta el punto de que les afecta en su vida diaria, suele ser la antesala de su llegada a este recurso municipal.
“Por ejemplo, problemas de comunicación con la familia o con la pareja, problemas a la hora de controlar las emociones y manejar los impulsos, o problemas de autoestima”, comenta.
Los profesionales pueden ayudar en situaciones como problemas de adaptación al entorno, que afectan por ejemplo a personas inmigrantes, o las autolesiones, donde el dolor físico infringido a uno mismo suele ser síntoma de un problema de gestión de las emociones ante una situación determinada.
Frente a estas cuestiones, el servicio ofrece dos vías de atención terapéutica. Una es la del coaching, en la cual se ofrece a la persona diversas herramientas para alcanzar objetivos que le permitan mejorar en su vida, a través de la participación en talleres, entre otras medidas.
La otra es la psicología en sí, con ocho sesiones por paciente en las que se busca que su malestar mental no se agrave ni cronifique, y el propósito de que la persona supere su problema o, si hace falta continuar con el tratamiento, derivándole a otros recursos públicos de Salud Mental para que siga estando atendida.
Sancho señala como ventaja de este servicio su ubicación en los centros juveniles, lo cual facilita “un entorno más amigable” en el que los jóvenes atendidos pueden participar en las actividades, lo cual supone un refuerzo para su mejoría. El carácter lúdico de estos centros permite vencer ciertas resistencias que estas terapias pueden generar en algunos jóvenes cuando la intervención tiene lugar en el habitual contexto sanitario.